La producción del Ron, desde lo tradicional a lo moderno
Para disfrutar de un buen Ron es necesario el uso de métodos, herramientas y técnicas muy antiguas y conservadoras así como también modernas. Sin embargo, los resultados siempre son reconocidos por los mejores catadores del mundo.
Hagamos un recorrido por este fascinante proceso:
Molino
Antiguamente, la extracción del jugo de la caña para la elaboración del Ron era manual. Se utilizaban máquinas de madera, pero hoy, se han sustituido por grandes trituradoras de hierro. El jugo es procesado hasta convertirse en el fermentado adecuado para el próximo proceso.
Alambique de destilación
Es una herramienta simple constituida por una caldera o retorta donde se calienta la mezcla. Los vapores emitidos salen por la parte superior y posteriormente se enfrían utilizando un serpentín, el cual se encuentra situado en un recipiente refrigerado por agua y el líquido resultante se recoge en un depósito final.
Es importante indicar que, para la producción del Ron, los destilados utilizados requieren de procesos con un filtrado doble para obtener alcohol a un 90%. Esto, y el delicado trabajo artesanal son parte de los secretos para fabricar una categoría de Ron “Premium”.
Analizadores y rectificadores
En algunas industrias roneras, las máquinas de destilación mantienen un aspecto a manera de ollas de cobre. Sin embargo, en otras, los recipientes son estructuras verticales o columnas denominados “analizadores y rectificadores”.
Son maquinarias más modernas que utilizan intercambio calórico y mantienen un proceso de rectificado continuo. Su diseño permite retirar el producto a diferentes niveles obteniendo una materia prima más pura. En este punto, el líquido es transparente o incoloro.
Almacenamiento en barricas de roble
El proceso del añejamiento en barricas de madera tiene orígenes ancestrales y bien documentados. Una vez que el Ron ha alcanzado la madurez deseada, las hileras de las barricas se van acercando al suelo, durante este proceso el Ron adquiere frescura, equilibrio y buena parte de su madurez, el resultado final es un licor rico en aromas y sabores.
Un dato interesante del añejamiento consiste en circular Rones por cuatro o cinco filas de barriles, una sobre otra, este método es parte de lo que se conoce como solera.
Añejado de altura
Ron San Miguel es una de las pocas bebidas en el mundo que se caracteriza por cumplir con un proceso de añejamiento natural en altura, que ayuda a imprimir al licor tonalidades y sabores de las barricas. En cambio, en los climas más frescos y húmedos que se encuentran sobre el nivel del mar los procesos de añejamiento son más lentos.
Definitivamente Cava San Miguel da lugar a un añejamiento inigualable que pocos pueden imitar.
Filtración y embotellado
Sea cual sea el color final de esta bebida, debe pasar por un proceso de filtración para limpiar sus impurezas. Se trata de una última refinación en filtros de placas con material celuloso. Esta última fase le confiere la elegancia cristalina y brillante al Ron.
Para terminar, otra máquina trabaja en un nítido proceso de desinfección y limpieza de las botellas, en donde posteriormente se coloca el producto para finalmente sellarlo y pasar al almacenamiento en cajas.
Conocer paso a paso el proceso de elaboración de esta bebida llamada “Ron”, hace que la valoración hacia este producto se eleve a un nivel superior. Así que antes de degustar los diferentes tipos de Rones, es recomendable que primero apreciemos su color, apariencia y olor.
Ahora que has podido conocer el proceso de elaboración de este emblemático licor, de seguro estarás más atento a cada una de sus características que derivan de una producción de calidad.
