Cinco actividades que se deberían realizar en Cuenca - Ecuador
26 de mayo de 2020
Cuenca, sin lugar a dudas, es una de las ciudades más emblemáticas del Ecuador, por ello, creemos que es muy importante invitarte a leer este artículo para que te enteres sobre algunos espacios representativos de la hermosa “Santa Ana de los Cuatro Ríos de Cuenca”.

1. Recorrer su Centro Histórico
Cuenca es una ciudad de inigualable belleza, por ello, todos los que la visitan, se enamoran de ella al darse cuenta de la enorme riqueza cultural que la envuelve, es por eso que, en el año 1999, fue declarada por la UNESCO “Patrimonio Cultural de la Humanidad” al conservar casi intacta, su arquitectura colonial, a través de los siglos.
No olvides admirar sus imponentes catedrales, iglesias y basílicas con sus majestuosas cúpulas: la Catedral de la Inmaculada Concepción y la Catedral Vieja; la Iglesia de El Carmen de la Asunción, la Iglesia de Santo Domingo, la Iglesia de la Santísima Virgen de la Merced de Turi; la Iglesia de San Alfonso; la Iglesia de Todos Santos, etc.
Entre otras actividades que podrías desarrollar para disfrutar de los atractivos icónicos de su Centro Histórico están los siguientes: sus bellas calles empedradas y adoquinadas, sus fachadas antiguas; plazas como: la de San Sebastián, y, la de Las Flores; la Plazoleta de la Cruz del Vado; el Parque de San Blas, etc.
2. Visitar sus Museos
Esta es una actividad obligada en Cuenca, pues contamos con una amplia oferta de Museos, entre ellos se destacan, Museo de la Ciudad; Museo de la Catedral Vieja; Museo Municipal de Arte Moderno; Museo de las Culturas Aborígenes; Museo Pumapungo; Museo de las Conceptas; Museo de Historia de la Medicina; Casa Museo Remigio Crespo Toral; Economuseo Municipal “Casa del Sombrero”; Museo Agustín Landívar; Museo de los Metales; Museo de Esqueletología; Museo de la Tierra y las Artes del Fuego; y obviamente, el de la Cava San Miguel.
3. Conocer sitios de interés Arqueológico
Para aprender más sobre la historia y cultura ecuatoriana, es interesante conocer sus ruinas, que son de gran importancia arqueológica para el mundo. Entre los lugares auténticos para visitarlos, tenemos: “Ruinas de Pumapungo”; y, “Ruinas de Todos Santos”.
Para encontrarte directamente con la cultura, te recomendamos caminar y observar los testimonios históricos, que permiten experimentar de primera mano sus orígenes.
4. Descubrir nuestro Centro Turístico “Cava San Miguel”
Estar en Cuenca y no conocer la Cava de Ron San Miguel es olvidar u rincón secreto de aroma y tradición.
La Cava San Miguel, es reconocida en la comarca y en el país como única en su tipo.
Este icónico lugar se encuentra ubicado en la Panamericana Sur, Km1, sector Narancay, ofreciendo al visitante la posibilidad de adentrarse en el mundo de este famoso licor.
Los visitantes tienen la oportunidad de: recorrer sus instalaciones, aprender sus procesos de producción, visitar el Museo de Ron, tener contacto con el arte local, realizar degustaciones en un entorno mágico, así como adquirir bellos suvenires y porque no llevar algunas botellas de su bebida preferida. Ron San Miguel.
5. Paseos ecológicos
Si estás en busca de naturaleza y/o destinos ecológicos para poder realizar actividades al aire libre, Cuenca te invita a transitar por preciosos parajes, así como realizar caminatas y deportes en el Parque Nacional Cajas, Cerro Cabogana, Rio Paute, Zoológico Amaru, Parque El Paraíso, atracciones que permiten recibir aire puro en su recorrido por los senderos y hasta efectuar prácticas de ciclismo.
Para quienes buscan adrenalina: Cuenca Canopy y el Columpio de Turi.
La riqueza de la flora y la fauna de nuestra ciudad, permiten la conexión con la naturaleza mientras el cuerpo se beneficia de salud y bienestar.
Sobre todo, no olvides visitar la única Cava
durante tu estadía en la ciudad de Cuenca, La Cava San Miguel.

Si crees que una visita a una cava de ron se trata solo de una simple degustación,
es porque aún no has experimentado lo que ofrece Cava San Miguel. Aquí, cada
recorrido es una inmersión en el arte y la ciencia de la destilación, la paciencia del
envejecimiento y la maestría de quienes crean esta bebida icónica.