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El café y el Ron, una excelente combinación
La combinación de estos dos elementos resulta exquisita para la mayoría de las personas, sus sabores encajan a la perfección y existen varias formas de tomar un café con unos toques de Ron.
Te lo contamos a continuación.
Café Pharisäer (Fariseo)
Bebida alcohólica muy similar al café irlandés, es una mezcla de Ron, café y nata servido en una taza especial, esta bebida es muy tradicional en el norte de Alemania, concretamente en las islas Frisias y Schleswig-Holstein.
Para elaborar el Pharisäer se debe preparar café, se vierte en una taza de gran tamaño junto con algunos centilitros de Ron, se recomienda calentar la taza previamente con vapor de una cafetera exprés o con agua caliente. Se añade azúcar y se procede a agitarlo, finalmente se coloca la nata y se sirve, no se aconseja removerlo con la nata, por el contrario, se debe beber con ella flotando en la superficie.
Si decides preparar un café al estilo Pharisäer te sugerimos espolvorear cacao sobre la nata, esta combinación de chocolate con café y Ron son excelentes y con algo de azúcar se potencia aún más su sabor.
Si quieres saber más de esta historia, lee nuestro blog “El Ron es una bebida importante en el mundo gastronómico”
El Carajillo
Su origen no es del todo claro, existen varias versiones, la más conocida y difundida menciona que esta bebida, a finales del siglo XIX y durante la Guerra de Independencia de Cuba, era consumida por soldados españoles, quienes tomaban un café mezclado con Ron para armarse de “coraje” antes de la batalla. En la actualidad se la consume relajadamente al terminar de comer.
El Carajillo es considerado uno de los digestivos más solicitados por aquellos que dicen disfrutar de los grandes placeres de la vida, tiene un sabor cremoso, se lo puede servir frío, con hielo generando una sensación reconfortante.
Otros prefieren tomarlo caliente, a esta bebida se lo conoce como Carajillo Quemado, su preparación puede parecer sencilla, pero requiere de cierta experticia, para algunos el resultado final es una verdadera obra de arte.
Su secreto está en flamear en un recipiente de barro, granos de café, canela, piel de limón y azúcar con Ron, mientras más dure este proceso, será menos el contenido alcohólico, al finalizar se cuela el líquido y se coloca en un vaso de cristal, se agrega el café expreso y listo, verás como se forman las capas de licor, café y espuma.
Existen muchos ingredientes que para algunos pueden ser poco comunes, en ocasiones se emplean para crear nuevos sabores, sensaciones y mezclas novedosas. El café y el Ron pueden resultar excelentes compañeros y brindarte una nueva forma de disfrutar de estas bebidas ancestrales.
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